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Murió el jurista Enrique Paixao, uno de los arquitectos de la reforma constitucional de 1994

Una figura pública comprometida con la Justicia, la transparencia y el afianzamiento de la democracia en la Argentina, cuando el país salía de una de sus páginas más oscuras, desaparece con la...

Murió el jurista Enrique Paixao, uno de los arquitectos de la reforma constitucional de 1994

Una figura pública comprometida con la Justicia, la transparencia y el afianzamiento de la democracia en la Argentina, cuando el país salía de una de sus páginas más oscuras, desaparece con la...

Una figura pública comprometida con la Justicia, la transparencia y el afianzamiento de la democracia en la Argentina, cuando el país salía de una de sus páginas más oscuras, desaparece con la muerte del doctor Enrique Paixao, fallecido a los 83 años. Secretario de Justicia del gobierno de Raúl Alfonsín, fue más tarde uno de los arquitectos del texto de la Constitución nacional surgida del Pacto de Olivos, al participar activamente de la definición de los acuerdos que permitieron incorporar significativos avances en la Reforma de 1994.

Reconocido por sus aportes como jurista, su capacidad de trabajo, su austeridad y su bajo perfil, fue además el primer presidente constitucional de la Auditoría General de la Nación, entre 1994 y fines de 1999, marcando un sendero inexplorado en el desarrollo de los organismos de control.

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Elegido convencional por la Unión Cívica Radical, integró la comisión que redactó los núcleos de coincidencias básicas, que era el eje central de los acuerdos alcanzados por Raúl Alfonsín y Carlos Menem para avanzar en una reforma sustantiva de la Constitución, garantizando la vigencia de los preceptos fundacionales y la natural adecuación a los nuevos desafíos. Se le otorgaron, así, jerarquía constitucional a los tratados internacionales de derechos humanos.

Paixao trabajó intensamente en la negociación de los puntos de coincidencias con referentes del gobierno de Menem, en una comisión que integraban los radicales Ricardo Gil Lavedra, Antonio Berhongaray y Arnoldo Klainer, junto a los peronistas Alberto García Lema y Carlos Corach. En algunas etapas se sumaron Jorge Yoma y Eduardo Menem.

Más allá del objetivo pragmático de Menem de lograr la cláusula que le permitía la reelección presidencial, para Paixao el proceso de la Reforma de 1994 significaba una oportunidad para trabajar en el rediseño del sistema institucional del país. Una de sus premisas –por instrucción de Alfonsín, era caminar hacia la atenuación del sistema presidencialista, que se consideraba excesivamente rígido.

A eso apuntaba la inclusión de la figura del jefe de Gabinete, tomada del modelo francés, aunque en la práctica su instrumentación no avanzó más allá de la función de un ministro coordinador. Entre otros cambios, se consagraron nuevos derechos y garantías - al medio ambiente y protección de datos personales- y el fortalecimiento del sistema federal.

La definición del núcleo de coincidencias básicas demoró dos meses de arduas negociaciones. Paixao recordaba, por ejemplo, que el punto de partida era la redacción del Pacto de Olivos, que tenía carácter telegráfico y no superaba una carilla. Por ejemplo, en el punto referido a la Capital Federal, el acuerdo solo mencionaba la elección directa del intendente. La comisión que trabajó en el texto definitivo del núcleo de coincidencias básicas avanzó luego en la consagración de la autonomía de la ciudad de Buenos Aires, con su propio estatuto constitucional, y los aspectos claves de la administración, la Justicia y la Legislatura porteña.

Otros aspectos decisivos fueron la creación del Consejo de la Magistratura, figura con la que también se procuraba limitar el poder presidencial en el proceso de selección de jueces, y la elección de un tercer senador nacional, mediante el voto directo. La comisión que integraba Paixao procuraba reducir el mandato de los senadores de nueve a cuatro años, para equipararlo con los diputados, pero hubo una fuerte resistencia y finalmente se reglamentó en seis años.

Enrique Paixao había nacido en Buenos Aires el 15 de febrero de 1941 y estudió en el colegio Manuel Belgrano, de los hermanos maristas. A los 24 años se graduó de abogado en la Facultad de Derecho de la Universidad de Buenos Aires, donde luego cursó el Doctorado y fue profesor titular de derecho penal, además de integrar el plantel docente en varias cátedras. Ejerció la profesión en las orientaciones de derecho público y administrativo y se dedicó, también, a la instancia del recurso extraordinario ante la Corte Suprema y al derecho penal.

Con la recuperación de la democracia, en un clima de tensión con el sector militar, Paixao asesoró en temas de defensa al Senado de la Nación y luego se desempeñó como secretario de Justicia, cuando el área formaba parte del Ministerio de Educación y Justicia, que conducía Carlos Alconada Aramburú. Entre 1973 y 1982 había sido secretario de la Procuración General de la Nación.

Realizó valiosos aportes como asesor legislativo. Intervino en la redacción de varias iniciativas, como las leyes de contabilidad pública y de administración financiera y sistemas de control, entre otras. En el ámbito partidario, fue apoderado de la UCR e integró la Comisión de Derechos Humanos del Comité Nacional.

Fuente: https://www.lanacion.com.ar/politica/murio-el-jurista-enrique-paixao-uno-de-los-arquitectos-de-la-reforma-constitucional-de-1994-nid11072024/

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